14 y los estrellaré unos contra otros, los padres con los hijos por igual'--declara el Señor. 'No tendré piedad, ni lástima, ni compasión, para dejar de destruirlos.'"
15 Escuchad y prestad atención, no seáis altaneros, porque el Señor ha hablado.
16 Dad gloria al Señor vuestro Dios antes que haga venir las tinieblas, y antes que vuestros pies tropiecen sobre los montes oscuros, y estéis esperando la luz, y El la transforme en profundas tinieblas, la torne en lobreguez.
17 Pero si no escucháis esto, mi alma sollozará en secreto por tal orgullo; mis ojos llorarán amargamente y se anegarán en lágrimas, porque ha sido hecho cautivo el rebaño del Señor.
18 Di al rey y a la reina madre: Humillaos, sentaos en el suelo , porque ha caído de vuestras cabezas vuestra hermosa corona.
19 Las ciudades del Neguev han sido cerradas, y no hay quien las abra: todo Judá ha sido llevado al destierro, llevado al cautiverio en su totalidad.
20 Alzad vuestros ojos, y ved a los que vienen del norte. ¿Dónde está el rebaño que te fue confiado, tus hermosas ovejas?