19 "Porque después que me aparté, me arrepentí, y después que comprendí, me di golpes en el muslo; me avergoncé y también me humillé, porque llevaba el oprobio de mi juventud."
20 ¿No es Efraín mi hijo amado? ¿No es un niño encantador? Pues siempre que hablo contra él, lo recuerdo aún más; por eso mis entrañas se conmueven por él, ciertamente tendré de él misericordia--declara el Señor.
21 Levanta para ti señales, coloca para ti majanos; presta atención a la calzada, al camino que anduviste. Vuelve, virgen de Israel, vuelve a estas tus ciudades.
22 ¿Hasta cuándo andarás errante, hija infiel? Porque el Señor ha creado algo nuevo en la tierra: la mujer rodeará al hombre.
23 Así dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Otra vez hablarán esta palabra en la tierra de Judá y en sus ciudades, cuando yo restaure su bienestar: "El Señor te bendiga, morada de justicia, monte santo."
24 Y morarán juntamente en ella Judá y todas sus ciudades, los labradores y los que van con los rebaños.
25 Porque yo he de satisfacer al alma cansada y he de saciar a toda alma atribulada.