2 Ya no hay alabanza para Moab, en Hesbón han tramado mal contra ella: "Venid y quitémosla de entre las naciones." También tú, Madmena, serás silenciada, la espada te seguirá.
3 Voz de clamor desde Horonaim: "Devastación y gran destrucción."
4 Moab está quebrantada, sus pequeños dejan oír gritos de angustia.
5 Porque la cuesta de Luhit con llanto continuo la suben; porque a la bajada de Horonaim se oyen gritos angustiosos de destrucción.
6 Huid, salvad vuestras vidas, sed como un enebro en el desierto.
7 Por cuanto pusiste tu confianza en tus ganancias y en tus tesoros, también tú serás conquistada, y Quemos saldrá al destierro junto con sus sacerdotes y sus príncipes.
8 Vendrá el destructor de cada ciudad, y ninguna ciudad escapará; también el valle será devastado, y la meseta será destruida, como ha dicho el Señor.