18 Serpentean las sendas de su curso, se evaporan en la nada y perecen.
19 Las caravanas de Temán los buscaron, los viajeros de Sabá contaban con ellos.
20 Quedaron frustrados porque habían confiado, llegaron allí y fueron confundidos.
21 Ciertamente, así sois vosotros ahora, veis algo aterrador y os espantáis.
22 ¿Acaso he dicho: "Dadme algo^, "De vuestra riqueza ofrecedme un soborno",
23 "Libradme de la mano del adversario", o: "Rescatadme de la mano de los tiranos"?
24 Instruidme, y yo callaré; mostradme en qué he errado.