6 Pues, he aquí, se irán a causa de la destrucción; Egipto los recogerá, Menfis los sepultará. La ortiga poseerá sus tesoros de plata; cardos crecerán en sus tiendas.
7 Han llegado los días del castigo, han llegado los días de la retribución; ¡que lo sepa Israel! Un insensato es el profeta, un loco el hombre inspirado, a causa de la magnitud de tu culpa, y por tu mucha hostilidad.
8 Vigía con mi Dios era Efraín, un profeta; sin embargo el lazo de cazador está en todos sus caminos, y en la casa de su Dios hay sólo hostilidad.
9 Se han corrompido profundamente como en los días de Guibeá; El se acordará de su iniquidad, castigará sus pecados.
10 Como uvas en el desierto hallé a Israel; como las primicias de la higuera en su primera cosecha vi a vuestros padres. Pero fueron a Baal-peor y se consagraron a la vergüenza, y se hicieron tan abominables como lo que amaban.
11 Como un ave volará de Efraín su gloria: no habrá nacimiento, ni embarazo, ni concepción.
12 Aunque críen a sus hijos, se los quitaré hasta que no quede hombre alguno. Sí, ¡ay de ellos también cuando de ellos me aparte!