3 No des tu vigor a las mujeres, ni tus caminos a lo que destruye a los reyes.
4 No es para los reyes, oh Lemuel, no es para los reyes beber vino, ni para los gobernantes desear bebida fuerte;
5 no sea que beban y olviden lo que se ha decretado, y perviertan los derechos de todos los afligidos.
6 Dad bebida fuerte al que está pereciendo, y vino a los amargados de alma.
7 Que beba y se olvide de su pobreza, y no recuerde más su aflicción.
8 Abre tu boca por los mudos, por los derechos de todos los desdichados.
9 Abre tu boca, juzga con justicia, y defiende los derechos del afligido y del necesitado.