29 Convirtió sus aguas en sangre, e hizo morir sus peces.
30 Pululó su tierra de ranas hasta en las alcobas de sus reyes.
31 El habló, y vinieron enjambres de moscas y mosquitos por todo su territorio.
32 Les dio granizo por lluvia, y llamas de fuego en su tierra.
33 Devastó también sus vides y sus higueras, y destrozó los árboles de sus territorios.
34 El habló, y vinieron langostas, y orugas sin número;
35 que devoraron toda la vegetación de su país, y se comieron el fruto de su suelo.