16 No temas cuando alguno se enriquece, cuando la gloria de su casa aumenta;
17 porque nada se llevará cuando muera, ni su gloria descenderá con él.
18 Aunque mientras viva, a sí mismo se felicite (y aunque los hombres te alaben cuando prosperes),
19 irá a reunirse con la generación de sus padres, quienes nunca verán la luz.
20 El hombre en su vanagloria, pero sin entendimiento, es como las bestias que perecen.