6 Y los cielos declaran su justicia, porque Dios mismo es el juez. (Selah)
7 Oye, pueblo mío, y hablaré; Israel, yo testificaré contra ti. Yo soy Dios, tu Dios.
8 No te reprendo por tus sacrificios, ni por tus holocaustos, que están continuamente delante de mí.
9 No tomaré novillo de tu casa, ni machos cabríos de tus apriscos.
10 Porque mío es todo animal del bosque, y el ganado sobre mil colinas.
11 Toda ave de los montes conozco, y mío es todo lo que en el campo se mueve.
12 Si yo tuviera hambre, no te lo diría a ti; porque mío es el mundo y todo lo que en él hay.