10 Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su gracia para conmigo no resultó vana; antes bien he trabajado mucho más que todos ellos, aunque no yo, sino la gracia de Dios en mí.
11 Sin embargo, haya sido yo o ellos, así predicamos y así creísteis.
12 Ahora bien, si se predica que Cristo ha resucitado de entre los muertos, ¿cómo dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos?
13 Y si no hay resurrección de muertos, entonces ni siquiera Cristo ha resucitado;
14 y si Cristo no ha resucitado, vana es entonces nuestra predicación, y vana también vuestra fe.
15 Aún más, somos hallados testigos falsos de Dios, porque hemos testificado contra Dios que El resucitó a Cristo, a quien no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan.
16 Pues si los muertos no resucitan, entonces ni siquiera Cristo ha resucitado;