2 Os di a beber leche, no alimento sólido, porque todavía no podíais recibirlo . En verdad, ni aun ahora podéis,
3 porque todavía sois carnales. Pues habiendo celos y contiendas entre vosotros, ¿no sois carnales y andáis como hombres?
4 Porque cuando uno dice: Yo soy de Pablo, y otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois simplemente hombres?
5 ¿Qué es, pues, Apolos? Y ¿qué es Pablo? Servidores mediante los cuales vosotros habéis creído, según el Señor dio oportunidad a cada uno.
6 Yo planté, Apolos regó, pero Dios ha dado el crecimiento.
7 Así que ni el que planta ni el que riega es algo, sino Dios, que da el crecimiento.
8 Ahora bien, el que planta y el que riega son una misma cosa, pero cada uno recibirá su propia recompensa conforme a su propia labor.