5 pero ellos darán cuenta a aquel que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos.
6 Porque con este fin fue predicado el evangelio aun a los muertos, para que aunque sean juzgados en la carne como hombres, vivan en el espíritu conforme a la voluntad de Dios.
7 Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed pues prudentes y de espíritu sobrio para la oración.
8 Sobre todo, sed fervientes en vuestro amor los unos por los otros, pues el amor cubre multitud de pecados.
9 Sed hospitalarios los unos para con los otros, sin murmuraciones.
10 Según cada uno ha recibido un don especial , úselo sirviéndoos los unos a los otros como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.
11 El que habla, que hable conforme a las palabras de Dios; el que sirve, que lo haga por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén.