17 Saúl les ordenó:— Búsquenme a alguien que toque bien y tráiganmelo.
18 Entonces uno de los servidores le dijo:— Yo conozco a un hijo de Jesé, el de Belén, que sabe tocar y que además es valiente, buen guerrero*, elocuente, atractivo y el Señor está con él.
19 Saúl mandó emisarios a decir a Jesé:— Envíame a tu hijo David, el que está con el rebaño.
20 Jesé preparó un asno, tomó pan, un pellejo de vino y un cabrito y se los envió a Saúl con su hijo David.
21 David llegó y se presentó ante Saúl. Este le tomó mucho cariño y lo hizo su escudero.
22 Luego mandó decir a Jesé:— Deja que David se quede a mi servicio, pues me ha caído bien.
23 Y cuando el mal espíritu atacaba a Saúl, David tomaba el arpa y se ponía a tocar. Entonces Saúl se calmaba, se sentía mejor y se le pasaba el mal espíritu.