1 Cuando Nicanor se enteró de que Judas y sus hombres andaban por la región de Samaría, resolvió atacarlos en día de descanso, para no correr ningún riesgo.
2 Los judíos que iban con él a la fuerza, le dijeron:— No los mates de modo tan despiadado y bárbaro, sino más bien respeta el día que aquel que todo lo ve santificó especialmente.
3 Pero el muy criminal preguntó si había en el cielo un soberano que hubiera ordenado celebrar el sábado.
4 Ellos respondieron:— El Señor que vive y es Soberano en el cielo, es quien ha mandado celebrar el séptimo día.