7 El jefe del personal de la corte les puso otros nombres: a Daniel lo llamó Baltasar; a Ananías le puso Sadrac; a Misael, Mesac; y a Azarías, Abednegó.
8 Daniel decidió no contaminarse con la comida y el vino de la mesa real, y pidió al jefe del personal que le permitiera no contaminarse.
9 Dios hizo que Daniel se ganara la benevolencia y el favor del jefe del personal
10 que dijo a Daniel:— Tengo miedo del rey, mi señor, pues les ha asignado lo que tienen que comer y beber. Si los encuentra más demacrados que el resto de los jóvenes que tienen la misma edad que ustedes, harán que me juegue la cabeza ante el rey.
11 Entonces Daniel dijo al responsable a quien el jefe del personal había confiado a Daniel, Ananías, Misael y Azarías:
12 — Mira, vas a poner a prueba a estos siervos tuyos durante diez días. Que nos den legumbres para comer y agua para beber.
13 Después compara personalmente nuestro aspecto con el de los jóvenes que comen a la mesa del rey; una vez comprobados los resultados, toma con nosotros la decisión que debas tomar.