8 El árbol creció corpulento,su copa llegaba al cielo,visible desde toda la tierra.
9 Tenía un ramaje magníficoy tal cantidad de frutosque había comida para todos.Las fieras del campovenían a cobijarse a su sombra;todas las aves del cieloacudían a anidar en sus ramas.Todos los seres vivientesse nutrían de aquel árbol.
10 En las visiones que pasaban por mi mente mientras dormía, pude ver cómo un santo vigilante bajaba del cielo
11 y gritaba a pleno pulmón:¡Talen el árbol, corten su ramaje;arranquen sus hojas, tiren sus frutos!Que las bestias huyan de debajo del árbol,que los pájaros todos abandonen sus ramas.
12 Pero dejen en tierra tocón y raíces,sujetos con cadenas de hierro y de bronce,como una más de las matas del campo.Que el rocío del cielo lo empape de humedad,que comparta con las bestias la hierba del campo.
13 Que sea desposeído de entendimiento humano,que su razón* se equipare a la de un animal,hasta que hayan pasado siete años.
14 Esta es la sentencia que dictan los Vigilantes,esta es la decisión tomada por los Santos.Así reconocerán todos los vivientesque el Altísimo controla los reinos humanos:se los da a quien le place y ensalza al más humilde.