1 El día trece del duodécimo mes, es decir, el mes de Adar, día en el que debía ejecutarse el decreto real, cuando los enemigos de los judíos esperaban dominarlos, cambiaron las cosas y fueron los judíos quienes les dominaron a ellos.
2 En todas las provincias del rey Asuero los judíos se organizaron en sus ciudades para hacer frente a aquellos que buscaban exterminarlos. Y nadie se atrevió a enfrentarse a los judíos, porque les tenían miedo.
3 Los jefes de las provincias, los sátrapas, los gobernantes y altos funcionarios reales se pusieron del lado judío por miedo a Mardoqueo,
4 pues este era ya un personaje importante en el palacio real, su fama se extendía por todas las provincias y cada día era más poderoso.
5 Los judíos hicieron con sus enemigos lo que quisieron; los pasaron a filo de espada, los masacraron y acabaron con ellos.
6 Tan solo en la ciudadela de Susa mataron y aniquilaron a quinientas personas;
7 acabaron también con Parsandatá, Dalfón, Aspatá,