9 Subirás como un huracán, llegarás como un nubarrón para cubrir todo el país, tú y todas tus tropas, pueblos numerosos.
10 Esto dice el Señor Dios: Aquel día te vendrán a la mente ciertos proyectos y concebirás un plan perverso.
11 Pensarás: “Voy a atacar un país lleno de brechas, a gente confiada que vive en ciudades sin murallas, cerrojos ni puertas.
12 Me dedicaré al pillaje y al saqueo, hurgando entre ruinas repobladas, actuando contra un pueblo reunido de entre las naciones, que ha adquirido ganado y otras propiedades, y que habita en el ombligo del mundo”.
13 Sabá, Dedán, los mercaderes de Tarsis y todos sus comerciantes te preguntarán: “¿Has venido para dedicarte al pillaje? ¿Has reunido a tu ejército para saquear, para llevarte la plata y el oro, para robar el ganado y el resto de las propiedades; en suma, para llevarte con un botín incalculable?”.
14 Por eso, profetiza, hijo de hombre. Comunica lo siguiente a Gog: Esto dice el Señor Dios: Aquel día, cuando mi pueblo Israel se establezca confiado, seguro que te enterarás
15 y llegarás desde tu tierra, del extremo norte, acompañado de pueblos numerosos, todos montados a caballo: una enorme muchedumbre, un ejército inmenso.