26 Y Abimélec le dijo:— No tengo idea de quién pudo haber hecho esto. Yo no sabía nada de esto y tampoco tú me habías dicho nada.
27 Entonces Abrahán tomó algunas ovejas y vacas, se las dio a Abimélec y los dos hicieron una alianza.
28 Después Abrahán apartó siete corderas del rebaño,
29 por lo que Abimélec le preguntó:— ¿Para qué has apartado estas siete corderas?
30 Abrahán le respondió:— Para que estas siete corderas que hoy te regalo sirvan de testimonio de que yo cavé este pozo.
31 Por esa razón, aquel lugar se llamó Berseba, pues allí los dos hicieron un juramento.
32 Una vez sellada la alianza en Berseba, Abimélec en compañía de Picol, el jefe de su ejército, regresó al país de los filisteos.