19 Maravillados de su hermosura, pensaban los soldados que también los israelitas serían dignos de admiración, y se decían unos a otros:— ¿Quién puede menospreciar a un pueblo que cuenta con mujeres como esta? … ¡No nos conviene dejar con vida ni a uno solo de sus hombres, pues los que queden son capaces de engañar a toda la tierra!