79 Que vengan a mí quienes te veneran,quienes conocen tus mandatos.
80 Sea mi corazón fiel a tus normasy no tendré que avergonzarme.
81 Yo ansío tu salvación,en tu palabra pongo mi esperanza.
82 Se consumen mis ojos por tu promesay me pregunto: “¿Cuándo te apiadarás de mí?”.
83 Soy como un odre arrugado por el humo,pero no he olvidado tus normas.
84 ¿Cuánto tiempo vivirá tu siervo?¿Cuándo juzgarás a quienes me persiguen?
85 Me han cavado fosas los soberbios,los que no viven de acuerdo a tu ley.