15 Es más, resulta que somos testigos falsos de Dios, por cuanto hemos dado testimonio contra él al afirmar que ha resucitado a Cristo, cosa que no es verdad si se da por supuesto que los muertos no resucitan.
16 Porque si los muertos no resucitan, es que no ha resucitado Cristo.
17 Y si Cristo no ha resucitado, la fe de ustedes carece de valor y aún siguen ustedes hundidos en el pecado.
18 En consecuencia también habremos de dar por perdidos a los cristianos que han fallecido.
19 Si todo cuanto esperamos de Cristo se limita a esta vida, somos las personas más dignas de lástima.
20 Pero no, Cristo ha resucitado venciendo la muerte y su victoria es anticipo de la de aquellos que han muerto.
21 Pues si por un hombre vino la muerte, también por un hombre viene la resurrección de los muertos.