8 Así que nosotros debemos acogerlos y colaborar con ellos en la difusión de la verdad.
9 He escrito unas líneas a la comunidad, pero Diotrefes, en su afán por manejarlo todo, no nos ha hecho ningún caso.
10 Por eso, cuando yo vaya, le echaré en cara su conducta: sus palabras insidiosas contra mí y, por si esto fuera poco, su negativa a recibir a los hermanos. Hasta se atreve a prohibir a otros que los reciban, bajo la amenaza de expulsarlos de la Iglesia.
11 Pero tú, querido hermano, no imites lo malo, sino lo bueno. Quien hace el bien pertenece a Dios; quien hace el mal es que desconoce a Dios.
12 En cuanto a Demetrio*, todos, y la misma verdad lo confirma, dan testimonio a su favor. Un testimonio al que sumamos el nuestro, y tú sabes que nuestro testimonio es digno de crédito.
13 Te escribiría muchas más cosas, pero no quiero hacerlo con tinta y pluma.
14 Confío en verte pronto y hablar personalmente contigo.