15 origen de toda paternidad tanto en el cielo como en la tierra,
16 y le pido que, conforme a la riqueza de su gloria, su Espíritu los llene de fuerza y energía hasta lo más íntimo del ser.
17 Que Cristo habite, por medio de la fe, en el centro de la vida de ustedes y que el amor les sirva de cimiento y de raíz.
18 Serán así capaces de entender, en unión con todos los creyentes, cuán largo y ancho, cuán alto y profundo
19 es el amor de Cristo; un amor que desborda toda ciencia humana y los colma de la plenitud misma de Dios.
20 A Dios que, desplegando su poder sobre nosotros, es capaz de realizar todas las cosas incomparablemente mejor de cuanto pensamos o pedimos,
21 a él la gloria en Cristo y en la Iglesia, de edad en edad y por generaciones sin término. Amén.