2 tal y como nos los transmitieron quienes desde el principio fueron testigos presenciales y encargados de anunciar el mensaje.
3 Pues bien, muy ilustre Teófilo, después de investigar a fondo y desde sus orígenes todo lo sucedido, también a mí me ha parecido conveniente ponértelo por escrito ordenadamente,
4 para que puedas reconocer la autenticidad de la enseñanza que has recibido.
5 Durante el reinado de Herodes* en Judea, hubo un sacerdote llamado Zacarías, que pertenecía al grupo sacerdotal de Abías*. La esposa de Zacarías, llamada Isabel, pertenecía también a la descendencia de Aarón.
6 Ambos esposos eran rectos delante de Dios, intachables en el cumplimiento de todos los mandatos y disposiciones del Señor.
7 Eran los dos de edad muy avanzada y no tenían hijos, porque Isabel era estéril.
8 Estando un día Zacarías ejerciendo el servicio sagrado conforme al orden establecido,