3 Saúl acampó en el monte de Jaquilá, frente al desierto, al lado del camino. Cuando David, que vivía en el desierto, se enteró de que Saúl lo venía siguiendo,
4 envió espías para confirmar si Saúl se encontraba en Jaquilá.
5 Entonces David se dirigió al campamento de Saúl y vio donde dormían Saúl y Abner. Abner hijo de Ner era el comandante del ejército de Saúl. Saúl se encontraba dormido dentro del campamento con todo el ejército a su alrededor.
6 David le preguntó a Ajimélec el hitita y a Abisay hijo de Sarvia, hermano de Joab: —¿Quién quiere ir conmigo al campamento de Saúl? Abisay respondió: —Yo voy contigo.
7 Cuando se hizo de noche, David y Abisay fueron al campamento de Saúl y lo encontraron dormido dentro del campamento con su lanza clavada en la tierra a su cabecera. Abner y los demás soldados estaban dormidos alrededor de Saúl.
8 Abisay le dijo a David: —Hoy es el día en que Dios te ha entregado a tu enemigo. Déjame clavar a Saúl al suelo con su propia lanza, ¡Un solo clavazo y listo!
9 Pero David le dijo a Abisay: —¡No lo mates! ¡El que le haga daño al rey que el SEÑOR eligió será castigado!