19 »Yo quería saber lo que representaba el cuarto animal que era muy distinto a los otros. Ese animal era terrible, espantoso y de una fuerza impresionante. Tenía dientes de hierro y garras de bronce. Todo lo devoraba y trituraba, y el resto lo pisoteaba con las pezuñas.
20 Quería saber el significado de los diez cuernos de la cabeza, y del último que le apareció y rompió tres de los que ya tenía. Este nuevo cuerno tenía ojos de humano y una boca que alababa su gran poder; su tamaño era mayor que el de los otros.
21 Mientras yo miraba, ese pequeño cuerno empezó a pelear contra los santos de Dios y los derrotaba.
22 Hasta que apareció el Anciano venerable y favoreció a los santos del Dios altísimo. Así los santos derrotaron al monstruo y se apoderaron del reino.
23 »Luego, el que me estaba explicando dijo: “El cuarto animal es el cuarto reino que es distinto a los otros reinos. Devorará toda la tierra, la pisoteará y la destruirá.
24 Los diez cuernos representan a los diez reyes de ese reino. Después de ellos vendrá otro rey que será muy distinto a los otros. Ese nuevo rey derrocará a tres reyes.
25 Ese mandatario hablará en contra del Dios altísimo y causará daño y sufrimiento a los santos de Dios. También tratará de cambiar las leyes y las costumbres. Los santos de Dios estarán bajo su poder durante tres años y medio.