12 —Escuché los reclamos de los israelitas, así que diles que al atardecer comerán carne y por la mañana comerán pan hasta quedar bien llenos. Así sabrán que yo soy el SEÑOR su Dios.
13 Esa tarde llegaron unas codornices que llenaron el campamento y por la mañana había una capa de rocío alrededor del campamento.
14 Cuando se evaporó la capa de rocío, algo muy fino y parecido a la escarcha quedó sobre la superficie del desierto.
15 Como no sabían qué era, cuando los israelitas lo vieron se preguntaron unos a otros: «¿Qué es esto?» Entonces Moisés les respondió: —Este es el pan que el SEÑOR les da para comer.
16 El SEÑOR ordenó que cada uno de ustedes recoja la cantidad que pueda comer. Recogerán aproximadamente dos kilos por persona, dependiendo del número de personas que haya en su casa.
17 Los israelitas hicieron exactamente eso. Algunos de ellos recogieron mucho y otros poco.
18 Cuando midieron la comida, tanto los que recogieron mucho como los que recogieron poco, recogieron lo suficiente para que cada persona de su familia comiera suficiente y no sobrara nada. Recogieron exactamente la cantidad que podían comer.