35 Prepara con ellas un incienso puro, salado y sagrado, mezclándolo todo bien, como un perfumero al hacer los perfumes.
36 Muele una parte para que quede muy fina y colócala frente al Testimonio en la carpa del encuentro donde yo me presento ante ti. Será sagrado para ustedes.
37 Usarás este incienso de esta forma particular solamente para el SEÑOR. No hagas ningún otro incienso de esta forma particular.
38 Si alguien hace un incienso como este para olerlo, lo deben expulsar de la comunidad israelita».