22 Los haré una nación en su tierra entre los montes de Israel. También tendrán un rey que los gobierne a todos. Ya no serán dos naciones ni estarán divididos en dos reinos.
23 Sus horribles y repugnantes ídolos y todos sus crímenes ya no los profanarán. Yo los rescataré de todos sus pecados y los purificaré. Ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios.
24 »Entonces mi siervo David será su rey. Así que tendrán un solo líder. Vivirán de acuerdo con mis enseñanzas, cumplirán mis leyes y las pondrán en práctica.
25 Se establecerán en la tierra que le di a mi siervo Jacob, donde vivieron sus antepasados. Vivirán allí con sus hijos y sus nietos para siempre. Mi siervo David será su líder para siempre.
26 Haré con ellos un pacto eterno de paz por su bien. Lo haré para que se multipliquen. Pondré mi templo en medio de ellos para siempre.
27 Moraré entre ellos. Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo.
28 Entonces las naciones sabrán que yo, el SEÑOR, santifico a Israel colocando mi templo entre ellos para siempre».