2 Te haré volver y te arrastraré, te haré salir del lejano norte y te traeré a los montes de Israel.
3 Lo haré sólo para quitarte el arco que llevas en la mano izquierda y tirar al piso las flechas de la mano derecha.
4 Tú y tus divisiones y los otros pueblos que están contigo morirán en batalla en los montes de Israel. Te dejaré como alimento para las aves de rapiña y los animales del campo.
5 Pues en el campo abierto es donde caerás muerto en batalla, porque yo lo he dicho. Es lo que afirma el Señor DIOS.
6 Entonces enviaré fuego contra Magog, el país de Gog, y contra los habitantes de la costa que se sienten tan seguros. Así aprenderán que yo soy el SEÑOR.
7 De esta manera haré que mi pueblo Israel conozca bien mi nombre y no permitiré que mi nombre sea profanado de nuevo. Las naciones extranjeras sabrán que yo soy el SEÑOR, el Santo de Israel.
8 ¡Ese día vendrá, sí vendrá! Esto lo dice el Señor DIOS. Ese es el día del que he hablado.