21 que he decidido bajar a ver si en realidad han hecho todas las cosas malas que me han dicho. Y si no las han hecho, yo lo sabré.
22 Finalmente los dos hombres se marcharon de ahí y caminaron hacia Sodoma. Pero Abraham se quedó de pie ante el SEÑOR.
23 Se le acercó y le dijo: —¿En realidad vas a destruir a los justos junto con los perversos?
24 Tal vez haya cincuenta justos en la ciudad. ¿Aun así la destruirías? ¿No perdonarías a toda la ciudad por esos cincuenta justos que viven en ella?
25 Tú no harías algo así: matar a la gente justa junto con la perversa. Si así fuera, el justo sería tratado de la misma manera que el perverso. Ni se te ocurra. ¿Acaso el Juez del mundo no debe hacer justicia?
26 Luego el SEÑOR dijo: —Si llego a encontrar cincuenta justos en Sodoma, por ellos perdonaré a toda la ciudad.
27 Entonces Abraham dijo: —Ya que me he atrevido a hablarte así, aunque no soy más que polvo y cenizas,