24 Rebeca le respondió: —Mi papá es Betuel, el hijo de Milca y Najor.
25 Luego dijo: —Sí, tenemos mucha paja y forraje para que coman sus camellos y lugar para que puedan dormir.
26 El siervo se inclinó y adoró al SEÑOR.
27 Dijo: «Bendito sea el SEÑOR, Dios de mi amo Abraham, quien le ha mostrado su fiel amor y lealtad a mi amo, y así el SEÑOR me ha llevado hacia la casa de los parientes de mi amo».
28 Después Rebeca corrió a contarle todo esto a su familia.
29 Ella tenía un hermano llamado Labán, quien corrió afuera hacia el hombre que estaba junto a la fuente.
30 Rebeca contó todo lo que le había dicho ese hombre, y Labán la estaba oyendo. Cuando Labán vio el anillo y los brazaletes que llevaba su hermana en los brazos, se acercó al hombre que estaba de pie junto a la fuente, al lado de sus camellos,