4 Prométeme que vas a ir a mi país, mi tierra natal, y allá vas a conseguir una esposa para mi hijo Isaac.
5 Entonces el siervo le dijo: —¿Qué hago si la mujer no quiere dejar su tierra para venir conmigo? ¿Me llevo a su hijo de regreso a esa ciudad que usted dejó?
6 Abraham respondió: —Asegúrate de no llevar a mi hijo a ese lugar.
7 El SEÑOR, Dios del cielo, me sacó de la casa de mi papá y de mi tierra natal y me trajo aquí. Allá era el hogar de mi papá y de mi familia, pero Dios me prometió que esta nueva tierra le iba a pertenecer a mi familia. Él te va a mandar un ángel para que tú puedas elegir allá una esposa para mi hijo.
8 Si la mujer dice que no quiere venir contigo, quedarás libre de esta promesa, pero asegúrate de no llevar a mi hijo allá.
9 Luego el siervo puso su mano bajo el muslo de su amo Abraham e hizo la promesa.
10 Después el siervo tomó diez de los camellos de su amo y se fue, llevando también muchos regalos hermosos. Se fue a la ciudad donde Najor vivía, en Aram Najarayin.