1 Cuando los seres humanos comenzaron a multiplicarse, a extenderse por toda la tierra, y tuvieron hijas,
2 los hijos de Dios vieron que las hijas de los seres humanos eran hermosas. Así que eligieron y se casaron con las que quisieron.
3 El SEÑOR dijo: «Mi espíritu no se quedará en los humanos para siempre porque ellos son mortales. Tan sólo vivirán ciento veinte años».
4 Los gigantes vivían en la tierra en esos días (y también después), cuando los hijos de Dios tuvieron relaciones sexuales con las hijas de los seres humanos y ellas tuvieron hijos con ellos. Son los héroes famosos de tiempos antiguos.