1 Permaneceré en mi puesto como un guardia; estaré listo en la torre de defensa. Esperaré a que me hable y responda a la demanda que he presentado.
2 El SEÑOR me respondió así: «Escribe claramente en tablillas la visión para que se pueda leer de corrido.
3 Esta visión es testimonio de que hay un día y una hora señalados. Aunque parezca que demora en llegar, espéralo; porque es seguro que llegará y no tardará.
4 »El que se cansa de esperar el cumplimiento de la visión no se comportará conforme a ella; pero el aprobado por Dios vivirá por su fe.
5 De seguro la riqueza engaña al orgulloso. Él es insaciable como la muerte, pero eso no le saldrá bien. Al igual que la muerte, nunca queda satisfecho; se apodera de todos los países y agarra para sí todas las naciones.
6 »Pero después, toda esa gente se burlará de él y lo harán objeto de chistes. Dirán: “Oye tú, que acumulas a montones lo que no te pertenece. Estás cargando con una deuda muy grande, ¿hasta cuando aguantarás así?”
7 ¿No se levantarán de repente en tu contra tus acreedores? ¿No se despertarán los que te aterrorizarán? Serás un botín para ellos.