14 He oído un mensaje del SEÑOR, un mensajero ha sido enviado a anunciarlo entre las naciones: «Reúnanse, ataquen a Edom, prepárense para la guerra».
15 «Te haré la nación más insignificante, despreciada entre los hombres.
16 Tu grandeza y tu orgullo te engañan. Tú, que vives en las grietas de las rocas y en las colinas altas, aunque como las águilas hagas tus nidos en las alturas, desde allí te haré caer, dice el SEÑOR.
17 »Edom será un lugar desolado y todos los que pasen se quedarán asombrados al ver sus heridas.
18 Será como sucedió con Sodoma y Gomorra, y sus ciudades vecinas, cuando fueron destruidas, dice el SEÑOR. Nunca más volverá alguien a vivir allí, ni siquiera a alojarse temporalmente.
19 »Como león que sale de los matorrales del río Jordán hacia las praderas, así de rápido echaré a Edom de su tierra. Nombraré sobre ellos a quien yo elija. Porque, ¿quién es como yo? ¿Quién puede desafiarme a mí? ¿Qué pastor se me enfrenta?»
20 Escucha entonces el plan que el SEÑOR tiene decidido contra Edom; lo que ha preparado contra los habitantes de Temán. De seguro que los más pequeños del rebaño serán arrastrados y sus praderas quedarán desoladas.