1 «Recorran las calles de Jerusalén y observen con cuidado lo que sucede allí. Busquen por todas las plazas a ver si encuentran a alguien que haga justicia y que busque la verdad. Si lo encuentran, perdonaré a Jerusalén.
2 Aunque juren en el nombre del SEÑOR serme fieles, no cumplen lo que prometen».
3 SEÑOR, lo que tú buscas es que tu pueblo sea fiel, Les diste una bofetada, pero no sintieron nada. Los hiciste picadillo, pero no aceptaron la disciplina. Son más tercos que una roca; se niegan a cambiar su manera de pensar y de vivir.
4 Entonces me dije: «Esos son sólo los pobres e ignorantes, por eso actúan así. No conocen el camino del SEÑOR ni lo que Dios ha ordenado.