1 Israel, no celebres ni festejes como hacen las otras naciones porque has sido infiel y te has alejado de tu Dios. Cometiste pecados sexuales en el lugar donde se trilla el grano.
2 Pero ni los lugares donde se trilla el grano ni donde se produce el vino proporcionarán alimento.
3 Los israelitas no vivirán más en la tierra del SEÑOR. Efraín regresará a Egipto y en Asiria comerán lo que se considera impuro.
4 No ofrecerán vino al SEÑOR ni le presentarán sus sacrificios. Sus sacrificios serán como pan ofrecido en un funeral, que vuelve impuro a todo el que lo come. Su pan sólo le servirá para calmar el hambre, pero no entrará en la casa del SEÑOR.
5 ¿Qué harán cuando llegue el festival, el día de la fiesta del SEÑOR?
6 Los israelitas huirán de la ruina, Egipto los reunirá a todos y Menfis los enterrará. Sus tesoros de plata se llenarán de ortigas y en sus carpas crecerán espinas.
7 «Israel, te llegó la hora de ajustar cuentas por tu gran culpa». Pero los israelitas dicen: «El profeta es un tonto. Este hombre lleno del Espíritu está loco». El profeta dice: «Serán castigados por sus graves pecados y por su gran odio».