11 Entonces los ancianos y todos los ciudadanos que estaban en la plaza dijeron: —Sí, somos testigos. Que el SEÑOR haga que esta mujer que entra en tu casa sea como Raquel y Lea, de quienes desciende la casa de Israel. ¡Que te conviertas en una tribu poderosa en Efrata! ¡Que tu nombre sea famoso en Belén!