7 Siempre le rogamos a Dios que ustedes no hagan nada malo. No lo hacemos para que la gente vea que hemos pasado la prueba, sino para que ustedes hagan lo que está bien, aunque parezca que nosotros hemos fallado.
8 Nosotros no podemos hacer nada que vaya en contra de la verdad. Sólo podemos hacer lo que está a favor de ella.
9 Nos sentimos felices cuando somos débiles si ustedes son fuertes. Oramos para que ustedes sean renovados.
10 Les escribo estas cosas mientras estoy lejos de ustedes. Así, cuando vuelva no tendré que usar la autoridad que el Señor me dio y ser duro con ustedes. El me dio esa autoridad para fortalecerlos, no para destruirlos.
11 Hermanos, llénense de alegría y traten de renovarse. Hagan lo que les digo: pónganse de acuerdo entre ustedes y vivan en paz. Así, el Dios de amor y paz estará con ustedes.
12 Salúdense unos a otros con un beso santo.
13 Todo el pueblo de Dios les manda saludos.