3 »¡Vayan! y tengan en cuenta que los envío como corderos en medio de lobos.
4 No lleven dinero ni provisiones ni sandalias, y no se detengan a saludar a nadie por el camino.
5 Cuando entren a alguna casa, primero digan: “La paz sea con ustedes”.
6 Si allí vive alguien de paz, la bendición de paz de ustedes se quedará con él. Pero si no, la bendición regresará a ustedes.
7 Quédense en esa casa, coman y beban lo que ellos les ofrezcan, porque los que trabajan merecen recibir su sustento. No vayan de casa en casa.
8 »Cuando lleguen a un pueblo donde sean bienvenidos, coman lo que les ofrezcan.
9 Sanen a los enfermos de ese pueblo y díganles: “El reino de Dios ya está cerca de ustedes”.