25 ¿Quién de ustedes con preocuparse va a añadir una hora a su vida?
26 Si no pueden hacer ni siquiera eso, ¿qué caso tiene preocuparse por lo demás?
27 »Fíjense cómo crecen los lirios. Ellos no trabajan ni hilan para hacer su vestido. Pero les aseguro que ni siquiera el rey Salomón con toda su gloria se vistió como uno de ellos.
28 Así que, si Dios viste así a todo lo que crece en el campo, que hoy tiene vida pero que mañana será quemado en un horno, con mucha más razón cuidará de ustedes. ¡No sean gente de poca fe!
29 No estén pendientes de lo que van a comer o a beber, ni se preocupen por eso.
30 La gente que no conoce a Dios trata de conseguir esas cosas, pero su Padre sabe que ustedes necesitan todo esto.
31 En vez de eso, busquen el reino de Dios, y se les dará todo lo que necesitan.