26 Lo mismo pasó con el segundo, el tercero y con todos los siete hermanos.
27 Después la mujer también murió.
28 Puesto que todos los hermanos se habían casado con ella, el día en que la gente resucite, ¿de quién será esposa la viuda?
29 Jesús les contestó: —Ustedes están equivocados porque no saben lo que dicen las Escrituras ni conocen el poder de Dios.
30 Cuando la gente resucite, no se casará, sino que todos serán como los ángeles del cielo.
31 Además, con respecto a la resurrección de los muertos, ¿no han leído lo que Dios les dijo a ustedes:
32 “Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob”? Él no es Dios de muertos, sino de vivos.