1 Luego, el Espíritu llevó a Jesús al desierto para que fuera tentado por el diablo.
2 Después de no comer nada durante cuarenta días y cuarenta noches, Jesús tenía mucha hambre.
3 Entonces el diablo vino para ponerlo a prueba y le dijo: —Si eres Hijo de Dios, diles a estas piedras que se conviertan en pan.
4 Pero Jesús le respondió: —Está escrito: “No sólo de pan vive el hombre; sino de toda palabra que Dios dice”.
5 Entonces el diablo llevó a Jesús a la ciudad santa y lo puso en lo más alto de un extremo del área del templo,
6 y le dijo: —Si eres Hijo de Dios, tírate abajo desde aquí porque está escrito: “Él mandará a sus ángeles que te cuiden. Sus manos te rescatarán para que ni siquiera te lastimes los pies contra las piedras”.