5 Te dejé en Creta para que pudieras terminar lo que quedaba por hacer y nombraras ancianos líderes de la iglesia en cada pueblo. Como te dije,
6 un anciano líder debe tener estas cualidades: una reputación sin mancha, fiel a su esposa e hijos fieles a Dios que nadie pueda acusar de tener mala conducta ni de ser rebeldes.
7 Un anciano líder debe vivir con honestidad porque está encargado de la obra de Dios. No debe ser arrogante, ni enojarse fácilmente, ni tomar mucho vino, ni gustarle andar en peleas ni ganar dinero de manera deshonesta.
8 Al contrario, debe estar dispuesto a recibir en su hogar a los necesitados, hacer el bien, ser sensato y justo, hacer lo que agrada a Dios y tener dominio propio.
9 Debe apegarse al mensaje verdadero tal como lo enseñamos, para que así también con la sana enseñanza pueda ayudar a los creyentes y corregir a los que se oponen.
10 Pues hay muchos que son rebeldes, hablan de cosas que no sirven para nada y llevan a otros por el mal camino. En particular me refiero a todos aquellos entre nosotros que dicen que los que no son judíos deben ser circuncidados para ser agradables a Dios.
11 Ellos están destruyendo familias enteras enseñando lo que no deben para conseguir dinero mal habido. ¡Hay que taparle la boca a esa gente!