15 Se fue de allí y se encontró con Jonadab, el hijo de Recab que había ido a visitarlo. Lo saludó y le preguntó:— ¿Estás de acuerdo conmigo, como yo lo estoy contigo?Jonadab respondió:— Sí, lo estoy.Jehú le dijo:— Entonces dame la mano.Le dio la mano y Jehú lo hizo subir con él en su carro.
16 Luego le dijo:— Ven conmigo y comprobarás cómo defiendo la causa del Señor.
17 Cuando llegó a Samaría mató a todos los supervivientes de la familia de Ajab que había allí hasta exterminarlos, como el Señor había anunciado a Elías.
18 Luego convocó a toda la gente y les dijo:— Si Ajab rindió culto a Baal, Jehú lo superará.
19 Así que, llamadme a todos los profetas de Baal y a todos sus fieles y sacerdotes sin excepción, porque quiero ofrecer a Baal un gran sacrificio. El que falte morirá.Jehú actuaba con astucia para exterminar a los fieles de Baal.
20 A continuación ordenó:— Anunciad una celebración solemne en honor de Baal.
21 La anunciaron. Luego envió mensajeros por todo Israel y llegaron todos los fieles de Baal, sin faltar ninguno. Entraron al templo de Baal y lo llenaron por completo.