9 Cuando hayas entrado en el país que el Señor tu Dios te va a dar, no imites las prácticas abominables de aquellas naciones.
10 Que no haya entre vosotros quien inmole en el fuego a su hijo o a su hija, ni quien practique la adivinación, el sortilegio, la brujería o la hechicería;
11 que nadie haga conjuros, consulte a espíritus y espectros, o evoque a los muertos.
12 El Señor detesta a quienes practican estas artes. Precisamente por estas costumbres abominables, el Señor tu Dios expulsa de tu presencia a esas naciones.
13 Sé completamente fiel al Señor tu Dios;
14 es cierto que esas naciones, cuyo territorio vas a poseer, escuchan a hechiceros y adivinos, pero a ti te ha prohibido todo eso el Señor tu Dios.
15 El Señor tu Dios suscitará en medio de ti, entre tus hermanos, un profeta como yo; a él deberéis escuchar.