11 No la pisarán ni personas ni animales; quedará deshabitada durante cuarenta años.
12 Convertiré a Egipto en el más desolado de los países; sus ciudades serán las más arruinadas y asoladas, durante cuarenta años. Dispersaré a los egipcios por las naciones, los aventaré por los países.
13 Porque esto dice el Señor Dios: Al cabo de cuarenta años reuniré a los egipcios de entre los pueblos adonde fueron dispersados.
14 Cambiaré la suerte* de los egipcios y los haré volver a la tierra de Patrós, su país de origen, donde formarán un reino modesto.
15 Será el más modesto de los reinos y no volverá a elevarse por encima de las naciones; haré que sea minúsculo para que no se imponga a las naciones.
16 Israel ya no pondrá en él su confianza, al recordar la culpa contraída por haberlo seguido. Y reconocerán que yo soy el Señor Dios.
17 El año vigésimo séptimo, el día uno del primer mes, el Señor me dirigió la palabra: