12 Al final de un corredor, junto al muro de protección, había una entrada que daba acceso a ellas.
13 A continuación me dijo:— Las habitaciones del norte y del sur, que están junto al patio, son las habitaciones sagradas donde comen las ofrendas consagradas los sacerdotes que pueden acercarse al Señor. Allí han de poner también las ofrendas consagradas: ofrendas de cereales, ofrendas expiatorias y penitenciales, pues el lugar es sagrado.
14 Una vez que los sacerdotes entran en el santuario, no pueden salir al atrio exterior sin antes quitarse las vestiduras litúrgicas, pues son sagradas. Tendrán que ponerse otra ropa antes de acercarse a un lugar público.
15 Cuando acabó de medir el interior del Templo, me sacó por el pórtico oriental y midió su perímetro.
16 Utilizó la vara para medir el lado oriental, cuya longitud resultó ser de doscientos cincuenta metros.
17 Después cambió de dirección y midió el lado norte: también doscientos cincuenta metros.
18 A continuación se dirigió al lado sur, que medía asimismo doscientos cincuenta metros.